El Secretario general de la Federación modera una mesa sobre el valor social de las inversiones en carreteras.
"Son muchos los elementos que deben ser ponderados antes de ejecutar, ampliar o mejorar cualquier carretera", ha dicho.
El secretario general de la Federación de Municipios y Provincias de Extremodera, Miguel Ruiz, ha moderado una mesas sobre el valor social de las inversiones en carreteras.
Ha sido en el marco del Symposium Nacional de Vías y Obras de la Administración Local, celebrado la pasada semana en Badajoz y en al que han participado el jefe de Servicio de Vías y Obras de la Diputación Provincial de Málaga, Manuel J. Piniella García; la presidenta del Cluster del Turismo de Extremadura, María José García Curto; el ingeniero del Área de Transformación Digital y Turismo de la Diputación de Badajoz, José Manuel Vázquez Miguel; y la técnica de Turismo. Dirección General de Turismo de la Diputación de Cáceres, Ana Manjón García
Durante su intervención, el Secretario general puso el énfasis en la dificultad que a su juicio supone para cualquier adminsitración pública decidir por donde pasa una infraestructura viaria “un quebradero de cabeza, señaló.
Bajo su parecer no deben primar sólo las cuestiones económicas, el recorrido más sencillo , sino que hay que introducir otras variables vinculadas con el acceso a los centros sanitarios, educativos de esa zona, con las oportunidades que esa obra va a dar a los pueblos, para exportar los productos autónomos o permitir el turismo sostenible . En definitiva, para Ruiz son muchos los elementos que deben ser ponderados antes de ejecutar, ampliar o mejorar cualquier vía, aunando el máximo número de voluntades.
Una buena carretera, segura y con vistas agradables, dijo, es una oportunidad para atraer visitantes. Un antídoto contra el despoblamiento en cada uno de sus kilómetros.
Es un hecho contrastado, que la vía por donde accedemos a un lugar puede potenciar sus valores turísticos y medioambientales sirviendo de reclamo para el turismo, concluyó.
El simposio, que se ha desarrollado en Badajoz durante tres días, ha sido organizado por la Asociación Española de la Carretera (AEC), entidad sin ánimo de lucro fundada en 1949, trabaja desde sus inicios en la defensa y promoción de las carreteras. Su objetivo primordial ha sido y sigue siendo conseguir una red viaria más segura y de mayor calidad y capacidad y ha contado con la colaboración de la Diputación de Badajoz.